ESTILISMO PERSONAL

Toda mi vida he mantenido esta pasión insaciable por la ropa y los zapatos. Crecí en el teatro, donde trabajaban mis padres, detrás de las bambalinas y en los camerinos, observando a los actores prepararse para la obra. He pasado horas mirando la mágica transformación de convertirse en otra persona y al mismo tiempo mantener tu personalidad.

Más tarde, cuando comencé a preparar los eventos de mis clientes, descubrí la alegría de arreglarme para cada ocasión, siguiendo, por supuesto, el código de vestimenta de cada evento y también las tendencias, pero siempre con mi sello personal.

La forma en que te vistes, definitivamente, cuenta. Dice mucho sobre ti.
 

También descubrí que no puedo comprar ropa nueva para cada boda para la que estoy trabajando. Tres veces por semana: no sería posible ni práctico. Así, acepté el desafío de hacer combinaciones con lo que realmente tengo en mi armario, agregando solo un nuevo detalle: tirantes a un vestido de noche largo, en lugar de los originales; una corbata nueva
podría complementar una falda de tul, ¡o un elegante fascinador a un esmoquin!
 

Esas pequeñas cosas locas llamadas “accesorios” marcan el gran cambio en tu aspecto. Espectacular no necesariamente es sinónimo de caro; se trata de ser ingenioso, abierto y creativo. Y así es como me gusta a mí llamar la atención.
Así, de manera natural, vino mi interés por el maquillaje profesional.

Tuve la oportunidad de formarme profesionalmente con Marusya Grigorova (Bulgaria) y Lourdes Ontiveros (España), aparte de mi larga experiencia como cliente de ambas. Incluso participé con ellas en varios interesantes proyectos.
A diferencia de mi estilo de vestir, cuando se trata de maquillaje mi formula es: ¡menos es más!

Nuestro estilo personal muestra quiénes somos de verdad.

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